Es totalmente
incorrecto afirmar que las familias son la causa de un trastorno alimenticio.
No obstante, determinadas características familiares, junto con factores
individuales de la persona enferma y factores sociales pueden predisponer a una
persona a sufrir este tipo de trastorno.
Factores familiares de
predisposición:
- Modelo de dinámica familiar: clima tenso, agresivo, distante, poco afectuoso, sobreprotector.
- Preocupación excesiva por el peso y las dietas en el padre o la madre.
- Obesidad de algún miembro de la familia. Para el tratamiento de estas enfermedades es indispensable contar con la colaboración de la familia.
- El camino que lleva a comprender esta enfermedad siempre es largo y doloroso, y es necesario para poder ayudar a curarla.
Los llamados grupos de padres ayudan a la familia de los enfermos a comprender la enfermedad de
las hijas, porque comparten sus experiencias con otras personas con la misma
situación.
Al principio los
padres buscan información sobre la enfermedad de las hijas y buscan soluciones
a determinadas conductas, y los otros padres pueden ayudar con sus
experiencias.
El objetivo básico de
estos grupos es formar a los padres para que sean elementos terapéuticos.